En busca de la superinteligencia artificial: Mark Zuckerberg arma un equipo de élite para desarrollar el sistema de IA más avanzado del mundo Meta ha reunido a un grupo de élite con el objetivo de cambiar para siempre el desarrollo de inteligencia artificial.

Meta no quiere quedarse atrás en la carrera de la inteligencia artificial (IA). El fundador y director ejecutivo de la compañía, Mark Zuckerberg, ha conformado un equipo élite con el objetivo de construir la plataforma de IA más avanzada del planeta.

De acuerdo con diversos reportes, Zuckerberg impulsó la formación de un nuevo laboratorio que buscará alcanzar lo que los expertos denominan "superinteligencia artificial", es decir, un sistema que supere las capacidades del cerebro humano.

La empresa contrató a Alexandr Wang, un joven prodigio de la tecnología y fundador de la empresa Scale AI. Su experiencia en el desarrollo de modelos para reconocimiento de datos despertó el interés de Meta, que considera hacer una inversión superior a los $10,000 millones de dólares, además de la integración de otros talentos de su empresa al nuevo equipo.

Asimismo, Meta ofreció contratos millonarios a investigadores de compañías rivales como OpenAI y Google. Algunas de estas propuestas ya fueron aceptadas. Hasta ahora, el equipo suma cerca de 50 integrantes, seleccionados y distribuidos estratégicamente en oficinas reorganizadas por el mismo Zuckerberg para garantizar una colaboración estrecha.

Relacionado: Inteligencia artificial general: el futuro que podría llegar en menos de 10 años

¿Qué llevó a Zuckerberg a formar un superequipo?

Según los reportes, el CEO de Meta mostró su inconformidad por el ritmo lento de los avances en inteligencia artificial dentro de la compañía, especialmente después de que varios lanzamientos no lograron el impacto esperado.

Entre ellos destaca el retraso del modelo insignia Behemoth, pospuesto por preocupaciones internas sobre su desempeño y sus posibles implicaciones, según reveló The Wall Street Journal.

Gigantes tecnológicos, como Microsoft, Amazon y Google, compiten por dominar el futuro de la inteligencia artificial general, una tecnología que todavía no existe, pero cuya promesa ha generado inversiones multimillonarias.

Microsoft ha canalizado más de $13,000 millones de dólares a OpenAI, mientras Amazon ha apostado $8,000 millones por Anthropic, otra startup especializada en IA.